Ultraderecha en Córdoba: Milei duro con Villarruel, la llamó "bruta traidora"

En “La Derecha Fest”, Milei llamó a enfrentar al “flagelo de la izquierda”, atacó a su vicepresidenta y prometió vetos mientras se jacta de un supuesto milagro económico.

Durante una multitudinaria jornada en Córdoba, el presidente Javier Milei protagonizó un encendido cierre de “La Derecha Fest”, un evento convocado por sectores libertarios al que definieron como “el festival más anti‑zurdo del mundo”. Desde el escenario del hotel Quorum, donde cerca de 2.500 asistentes le dieron respaldo, Milei se autoproclamó al frente del “mejor gobierno de la historia”, comparándose incluso con el primer mandato de Menem.

El presidente arengó con dureza a su audiencia: “Tenemos tres frentes de batalla: gestión, poder institucional y batalla cultural” y advirtió que “muchos se van a sorprender con los resultados de octubre". Además, prometió firmar vetos a leyes sobre jubilados, discapacitados y universidades.

El acto también profundizó la fractura en su espacio político: Milei acusó directamente a la vicepresidenta Victoria Villarruel de ser “bruta traidora”, tras su postura crítica en el Senado, y alentó a sus seguidores a dejarla de lado: “Roma no paga traidores”.

La jornada contó con una fuerte impronta ideológico-religiosa. Presidieron figuras como Agustín Laje y Nicolás Márquez, vinculados al ala ultraconservadora del espacio , además de personajes de redes sociales como “El Gordo Dan” y el periodista español Javier Negre. Merchandising de Trump, Meloni y Bukele flotaba en gigantografías como símbolos de su ideología global.

Milei aprovechó el momento para acusar a los “mandriles” (en referencia al kirchnerismo), insultar a la prensa “ensobrada” y exigir militancia activa en medios y redes. También celebró lo que llamó un “ajuste fiscal histórico” y eliminó supuestamente USD 50.000 M de deuda en un año.

El operativo de seguridad fue extremo: con un control tipo migratorio, policías, gendarmes y personal de Casa Militar, el evento excluyó a periodistas críticos —como Página/12—, quienes fueron retirados bajo custodia estatal.

“La Derecha Fest” reforzó el giro ultraconservador del gobierno de Milei. Su discurso acusatorio contra la izquierda y su propia vicepresidenta Villarruel revela una deriva agresiva y divisiva. La exaltación de la “batalla cultural” y la promesa de veto a leyes sociales anticipan una campaña electoral basada en confrontación y radicalización.