El Senado se apresta a rechazar el veto a la Ley de Discapacidad y a limitar los DNU de Milei
- Ambito Tucumano
- 4 sept
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Por primera vez en 22 años, el Congreso podría insistir con una ley vetada por el Presidente y también reformar el régimen de decretos de necesidad y urgencia para frenar el bypass institucional del Ejecutivo. Una sesión que marcará un antes y un después en la relación entre poderes.

El Senado de la Nación se prepara para una sesión histórica este jueves, donde likely consumará dos golpes severos al gobierno de Javier Milei: rechazará el veto presidencial a la Ley de Emergencia en Discapacidad y aprobará una reforma que limita drásticamente el uso de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU). Si la oposición consigue los dos tercios necesarios en ambas votaciones, será la primera vez en 22 años que el Congreso insiste con una ley vetada por el Poder Ejecutivo, rescatando la Ley de Discapacidad que declara la emergencia hasta diciembre de 2027 y restableciendo el equilibrio de poderes.
Un veto que cae: la Ley de Discapacidad resurge
La Ley de Emergencia en Discapacidad, vetada por Milei en agosto bajo el argumento de que generaba "desequilibrio fiscal", recuperaría plena vigencia. La norma, aprobada originalmente por amplia mayoría en ambas cámaras, establece:
Emergencia nacional en materia de discapacidad hasta el 31 de diciembre de 2027 (más allá del mandato de Milei)
Actualización automática de prestaciones y pensiones no contributivas según inflación, llevándolas al 70% del haber mínimo jubilatorio
Pago de deudas a prestadores de salud y actualización mensual de aranceles según el IPC de INDEC
Permiso para trabajar a beneficiarios de pensiones por invalidez mientras no superen dos salarios mínimos.
La Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) estimó que el impacto fiscal sería entre 0.22% y 0.42% del PBI, considerado "mínimo" por los impulsores de la ley. El veto fue rechazado en Diputados el 20 de agosto por 172 votos contra 73, y todo indica que el Senado seguirá el mismo camino con el respaldo de un amplio arco opositor.
La reforma que corta las alas a los DNU
Paralelamente, el Senado tratará una reforma profunda a la Ley 26.122 que regula el tratamiento de los DNU. La iniciativa, consensuada por kirchneristas, radicales, el PRO y bloques provinciales, establece:
Plazo perentorio de 90 días para que ambas cámaras se pronuncien sobre cada DNU. Vencido ese plazo, se considerarán derogados automáticamente (hoy rigen indefinidamente por silencio)
Rechazo por una sola cámara bastará para dejar sin efecto un decreto (hoy requiere el rechazo de ambas)
Prohibición de decretos "ómnibus" mediante el principio de "materia única": cada DNU deberá referirse a un solo tema específico
Imposibilidad de reemitir un DNU sobre la misma materia si fue rechazado, durante un año
Esta reforma apunta directamente al estilo de gobierno de Milei, quien ha usado masivamente los DNU para implementar reformas sin paso por el Congreso, como el famoso DNU 70/2023 que declaró emergencias en múltiples áreas y reformó mercados clave.
Sesión caliente y cuestiones de privilegio
La sesión promete ser explosiva desde el inicio. Se prevé el tratamiento de cinco cuestiones de privilegio contra la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, por su pedido de allanamiento a periodistas y medios que difundieron los audios del escándalo ANDIS. La oposición también evalúa -aunque finalmente postergó- presentar pedidos de interpelación a Karina Milei, señalada en los audios como supuesta beneficiaria de retornos del 3% en la Agencia Nacional de Discapacidad.
El gobierno llega extremadamente debilitado a esta sesión. En el Senado, los libertarios tienen solo 6 bancas y dependen de apoyos oscilantes del PRO y la UCR que, en votaciones recientes, se han mostrado reacios a respaldar al oficialismo. La última sesión mostró que el gobierno solo pudo retener el apoyo de sus 6 senadores más tres "soldados": Carmen Rivero y Martín Goerling Lara (PRO) y Carolina Losada (UCR).
Un hecho histórico en ciernes
Si el Senado rechaza el veto a la Ley de Discapacidad, será la primera vez desde abril de 2003 que el Congreso insiste con una ley vetada por el Presidente. Este hecho marcaría un punto de inflexión en la relación entre poderes, demostrando que un Congreso fragmentado puede encontrar unidad para oponer límites al Ejecutivo, incluso en un año electoral.
La sesión de este jueves no solo definirá el futuro de una ley crucial para un sector vulnerable de la sociedad, sino que redefinirá las reglas del juego entre los poderes del Estado, potentialmente devolviendo al Legislativo un rol de contralor que muchos consideraban perdido.
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