La magistrada fue encontrada culpable de tres cargos, incluyendo violación del proceso judicial y malos tratos al personal, y fue destituida de su cargo.
María Carolina Ballesteros fue destituida como jueza esta mañana tras ser declarada culpable por el Jurado de Enjuiciamiento de los tres cargos que pesaban en su contra. La decisión fue tomada por un jurado presidido por Eleonora Rodríguez Campos, vocal de la Corte Suprema de Tucumán, e integrado por representantes del Poder Ejecutivo, abogados y legisladores.
Cargos y proceso
Ballesteros enfrentó tres acusaciones principales:
Violación del proceso judicial: Se le imputó haber "violentado la esencia del proceso" en una causa en la que su padre fue víctima en 2022.
Exceso en su actividad jurisdiccional: Fue acusada de realizar afirmaciones y expresiones despectivas contra funcionarios del Ministerio Público de la Defensa (MPD) y el Ministerio Público Fiscal (MPF) en 2023.
Malos tratos al personal: Se le imputaron denuncias de malos tratos hacia el personal del Juzgado Penal de la V Nominación en 2019.
Durante el proceso, más de 50 testigos declararon de manera presencial y por escrito, respaldando las acusaciones contra la magistrada.
Consecuencias de la sentencia
De acuerdo con el Artículo 130 de la Constitución provincial, la sentencia implica la destitución de Ballesteros y su inhabilitación para ocupar cualquier puesto de honor o remunerado en la provincia. Además, se mantiene abierta la posibilidad de que enfrente responsabilidades adicionales en los tribunales ordinarios.
Declaraciones del jurado
Jorge Leal (h), uno de los integrantes del jurado, calificó la sentencia como "contundente" y destacó que los testigos ratificaron las acusaciones. "Pueden hacerse apreciaciones de carácter político, pero eso no nos compete a nosotros. No estamos para ningún revanchismo", afirmó.
Contexto y repercusiones
La destitución de Ballesteros marca un hito en la justicia tucumana, reforzando la importancia de la transparencia y la ética en el ejercicio de la función judicial. El caso ha generado un amplio debate sobre la conducta de los magistrados y la necesidad de garantizar la integridad del sistema judicial.
Con esta decisión, el Jurado de Enjuiciamiento reafirma su compromiso con la rendición de cuentas y el respeto a los principios fundamentales de la justicia.
Comments